Una empresa de "desokupación" acude al chalé que bloquea la urbanización del Rick’s en Gijón

El conflicto que paraliza la construcción de 103 viviendas en el entorno del Rick’s (PERI11-A) se tensiona. La Policía Nacional identificó este sábado a tres trabajadores de una empresa especializada en el desalojo de okupas que se presentaron a las puertas del chalé del Camino de los Olmos, donde continúa residiendo el hijo del propietario a pesar de haberse producido la venta del inmueble, lo que paraliza la recepción de las obras y el inicio de la construcción de los cuatro bloques proyectados en una urbanización.

El residente avisó a la Policía porque, según explica, «quemaron el timbre y se colgaron del portón de entrada» tras llamarle «okupa» y «silbar constantemente» mientras le insistían de forma reiterada que abandonasen la vivienda. «Son matones», incide. Los tres varones, de importante envergadura (uno de ellos ataviado con guantes negros), pertenecen a OkupAcción, una empresa itinerante a nivel nacional. Según defienden, están ejerciendo «una intermediación legal para el abandono de inmuebles okupados» y han sido contratados «por la promotora y la junta de compensación». Niegan que se esté increpando al residente y aseguran que «estarán de forma presencial los días que hagan falta» para «tratar de llegar a un acuerdo y evitar acudir a la vía judicial». Una vez en el lugar, la Policía Nacional se limitó a proceder a su identificación y posteriormente abandonó el lugar.

Los tres trabajadores acudieron frente a la vivienda con una carpeta con toda la documentación que, según explican, «demuestra que se está okupando de forma ilegal». En ese sentido, defienden que el hijo del propietario «alega tener un contrato de usufructo que es falso». «En cuanto se demuestre, podrá echársele de la vivienda con la ley en la mano», señalan. Por su parte, éste adelanta que ya ha hablado con su abogado y emprenderá acciones legales por lo sucedido. Además, insiste en que la promotora pagó un precio «muy inferior al valor real de la vivienda». También identificó «a un representante de Avintia con traje» que acompañó a los especialistas.

Los momentos de tensión llegan después de que, a finales de abril, la promotora Avintia anunciase un estancamiento de las negociaciones con el propietario de la vivienda por la venta del terreno. Semanas antes, habían enviado un comunicado en el que manifestaba que el propietario del chalé del Camino de los Olmos «están incumpliendo la ley» al ser «una obligación legal de los miembros de la Junta de Compensación la puesta a disposición de los terrenos y sus edificaciones» para posibilitar el derribo y comenzar la construcción de los bloques. «Aunque ya han abandonado la vivienda, permiten que su hijo, sin titularidad alguna sobre la vivienda, continúe residiendo en ella», denunciaron.

La Junta de Compensación abonó el pasado 12 de diciembre el valor de la propiedad según su tasación, unos 130.000 euros al descontar los gastos de urbanización. El dueño de la vivienda reconoce que, a pesar de discrepar con la cuantía, no se presentaron en su momento las debidas alegaciones ante la Junta de Compensación.

Lo que ahora mantiene estancadas las negociaciones son los derechos edificatorios del terreno. Según los especialistas en desalojo, Avintia ofreció «un dinero importante», otros 360.000 euros al propietario, oferta que declinó. Según los propietarios, la promotora pretende vincular la operación a una firma de un acta de entrega formal de llaves de la vivienda. Una fórmula que no convence al propietario, que se desvincula de la decisión de su hijo de permanecer en la inmueble.

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