El entorno de la asesina de Olivia, tras su suicidio en prisión: "En cuanto fuese consciente de lo que hizo, sabíamos que esto podría ocurrir"

La familia paterna de la niña continúa a la espera de conocer los detalles de la muerta de Noemí Martínez

Noemí Martínez, a su salida del Hospital de Jove después de asesinar a su hija.

Noemí Martínez, a su salida del Hospital de Jove después de asesinar a su hija.

El final de Noemí Martínez Largo, la única acusada por el asesinato de su hija Olivia en un piso de la avenida de Gaspar García Laviana en octubre del año pasado, no ha pillado por sorpresa en sus allegados. "En cuanto fuese consciente de lo que hizo, sabíamos que esto podría ocurrir, porque quería mucho a la niña", reflexionan desde el entorno de esta mujer que en la mañana del pasado domingo fue hallada muerta en su celda del Centro Penitenciario de Asturias. Se había ahorcado con una sábana.

Noemí Martínez, de 49 años y natural de El Espinar, en Segovia, se había mudado a Gijón con su hija por razones laborales. Tras perder la custodia en favor del padre de la pequeña, con el que mantuvo un largo litigio judicial, optó por suministrarle una gran dosis de pastillas para acabar con la vida de la pequeña. "O conmigo o con nadie", fueron las palabras pronunció a su llegada al Hospital de Jove, custodiada ya por la Policía Nacional después del crimen. A partir de ahí, la mujer no volvió a pronunciar palabra a lo largo de toda una instrucción que acabó acusándola de un delito de asesinato.

La ahora fallecida, según ha podido saber este periódico, siguió hablando de su hija en prisión en presente, "como si estuviera viva", durante varios meses. Es por ello que en su entorno no les pilla por sorpresa el desenlace. Tampoco en el Centro Penitenciario de Asturias. Nada más ingresar en la prisión asturiana, en la UTE, se le asignó una presa de confianza ante el temor de que pudiese suicidarse. Siempre le extrañaba al personal penitenciario que se mostrase tan fría. Sospechaban que "en cuanto cobrase conciencia de lo que había hecho se suicidaría". Y así fue.

Su muerte tuvo lugar después de que la semana pasada se concretase su imputación por un delito de asesinato. Ella estuvo presente en la vista. De ahí que ahora estuviera en la cárcel de Asturias, pues desde marzo residía en el penal de Brieva, en Ávila. Escuchar los cargos, explican en su entorno, "puede que le hiciera asumir lo ocurrido", reflexionan. Lo cierto es que ahora se procederá al archivo del caso ante el deceso de la única investigada. Mientras, la familia paterna de Olivia García espera a conocer todos los detalles por vía oficial para emitir una valoración pública al respecto del caso.

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