El ministro de Política Territorial y Función Pública, Miquel Iceta, afirmó ayer que el nuevo modelo de financiación no entrañará ningún privilegio para Cataluña, aunque sí concedió que deberá atender “las necesidades de todas las autonomías”.

“Siempre he defendido que la financiación no suponga privilegio ninguno”, declaró Iceta en relación a las quejas suscitadas por que este asunto sea abordado en la mesa de diálogo con el Govern. El Ministro avanzó que “habrá que ponerse” a la reforma del sistema de financiación después de las vacaciones. Varias autonomías, entre ellas la Comunidad Valenciana, ha urgido una actualización tras las carencias en materia de ingresos puestas de manifiesto por la pandemia.

También el Gobierno asturiano ha juzgado necesaria una mejora porque el actual modelo no cubre las necesidades para financiar los servicios públicos básicos. Iceta admitió que el Ejecutivo “lleva cierto retraso”, en una revisión pendiente desde 2014: “Hay que ponerse al debate con ganas de poner en común y de encontrar una solución satisfactoria para todos”.