Mente humana e inteligencia artificial

El IES Carreño Miranda, con el acuerdo de las familias y del profesorado, puso en marcha a comienzos del curso la prohibición del uso del teléfono móvil. La primera valoración ha sido muy positiva, tal como manifestaban a este periódico tres alumnas hace escasas fechas. El móvil ha sido sustituido por una mayor comunicación entre los alumnos y alumnas, han ganado en actitud de atención al desarrollo de las clases, reduciendo también su utilización cuando llegan a casa. La directora del centro, Natalia Menéndez, añadía que se han puesto en marcha nuevas actividades durante los recreos.

La positiva respuesta de los alumnos despeja la visión negativa sobre el intenso uso del móvil por parte de los jóvenes, poniendo en valor la capacidad del centro para generar cambios en los hábitos de los alumnos. Poner en marcha esta medida supone que la dirección y el profesorado del centro mantienen un alto grado de autoridad moral, son capaces de ser referentes para los alumnos para ayudarles en su maduración y formación.

Me ha alegrado mucho esta iniciativa y su respuesta porque, como creo que la mayoría de los que en su día estudiamos en ese centro, guardo un gran recuerdo de los aquellos siete años de formación académica y humana. En aquellos años oscuros, el Carreño Miranda era capaz de darnos la luz necesaria en conocimiento y en valores. Nuestra profesora de Filosofía, doña Luisa López Gastey solía decir, "el saber ocupa lugar". Era una idea disruptiva frente al pensamiento común de que el saber no ocupaba lugar. La informática le ha dado la razón, como muestra el tamaño de los servidores de datos.

La Inteligencia Artificial nos dice que no hay algoritmo que funcione sin millones de datos, por eso aquella formación llena de datos sobre Geografía, Historia, Filosofía o Ciencias de la Naturaleza nos permitió articular un pensamiento lógico e integrar los conceptos necesarios para entender el mundo. Ahora tenemos que acostumbrarnos a decidir nosotros cuándo y cómo usar las herramientas digitales, no cuando nos lo induzca su interesada inercia.

En el marco de la cuarta revolución industrial, la de la digitalización y la automatización, el uso de la Inteligencia Artificial y del resto de herramientas digitales no pueden anular los atributos sociales de las personas, nuestra capacidad de relación. Por eso, la iniciativa del IES Carreño Miranda tiene mucho más alcance que el de una mera iniciativa organizativa.

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