El PP propone un Muro con doble sentido, terrazas, parking bajo tierra y “un ‘cascayu’ más estético”

Diez puntos para cambiar el Muro. Pablo González, presidente del PP de Gijón, propuso ayer una reforma del paseo –de cara al próximo mandato– que incluya aceras más amplias con terrazas específicamente diseñadas para la zona, un doble sentido de circulación del tráfico –respetando el giro de Menéndez Pelayo– con carriles más amplios y separados por una pequeña mediana de una zona verde –para uso deportivo– que sustituya al actual “cascayu”. La propuesta de los populares incluye además un aparcamiento subterráneo en línea “de poco impacto técnico y económico”. Todas estas medidas forman parte de un decálogo que la formación enviará por escrito a la alcaldesa, Ana González, en el que también piden “pacificar políticamente toda la polémica del Muro”.

El presidente del PP mostró los diez puntos ayer durante una comparencia en la sede de su partido en Gijón. En ella también animó a la Alcaldesa a “dar un paso atrás” y abrir de forma inmediata el doble sentido de circulación en el Muro sin necesidad de que la asociación Stop Muro recaude los 47.958 euros que le exige el juez para ejecutar la sentencia del “cascayu”. El mandatario popular aseguró que este decálogo “son diez intentos para pacificar políticamente el Muro”, que a su juicio “no puede seguir dividiendo a los gijoneses”. “Sin duda es la gran polémica de este mandato y hay que acabar con ella”, remató.

En primer lugar, Pablo González reconoció ayer el derecho y legitimidad que cualquier gobierno tiene para reformar el Muro o cualquier otra parte de la ciudad con la intención de mejorar la zona. Sin embargo, advirtió a Ana González de que “un proyecto de reforma de un espacio tan simbólico como el Muro se tenía que haber hecho con un amplio consenso político y ciudadano”. En este sentido, el mandatario popular invitó al actual equipo de gobierno a que “se olviden del tema y sea un proyecto de la siguiente Corporación”, en la cual predijo que habrá una confluencia de fuerzas políticas distintas: “Sería un desaire el querer seguir adelante con el anteproyecto cuando solo queda un año de mandato”.

Respecto a las propuestas del PP para el nuevo Muro, una de las principales sería la construcción de un aparcamiento subterráneo en línea “de poco impacto técnico y económico”. “Este año que queda es el tiempo ideal para estudiar su viabilidad. Si se hace una reforma a las prisas, el parking quedaría a un lado y sería inviable hacerlo en un futuro. Una vez hecha la obra no la vas a levantar otra vez”, explicó Pablo González, que advirtió de que “va siendo hora de eliminar los aparcamientos en superficie y asumir su desaparición para dar espacio a un nuevo Muro”. Eso sí, con estacionamientos técnicos en superficie para taxi o carga y descarga: “Hay hueco para todo, está medido y se puede hacer perfectamente”.

La propuesta del PP al completo sería la siguiente, empezando por los edificios: una acera más ancha en la que se instalen terrazas de hostelería; le seguiría una carretera de plataforma única con doble sentido de circulación, seguida de una pequeña mediana que separe la vía de un nuevo “cascayu” para un uso deportivo. El paseo tradicional del Muro seguiría tal y como se encuentra en la actualidad, incluyendo bajo tierra un aparcamiento para estacionar vehículos en línea.

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