"Esto no es un suceso de la hostelería, es un suceso de la sociedad", señala la patronal Otea

El presidente de la patronal de hostelería y turismo Otea, José Luis Álvarez Almeida, hizo ayer hincapié, respecto a la agresión mortal que se produjo en la madrugada del sábado en Fomento, en que "esto no es un suceso de la hostelería, es un suceso de la sociedad". La patronal hostelera, el movimiento vecinal y el Ayuntamiento coincidieron en expresar su más enérgica condena a este hecho violento.

El luctuoso suceso se produjo en la vía pública, después de que los porteros del bar de copas en el que coincidieron la víctima y sus agresores echaran a la calle primero a los dos agresores y, tras ellos, a la víctima, luego de que hubieran tenido un encontronazo en el interior del local.

En base a la información que recabó respecto a lo acaecido, Álvarez Almeida considera que "se actuó con el protocolo de agresiones, que es separar a las personas (dentro del local) y cuando están fuera, ocurre lo que ocurre", explicando que siempre se procura "que no se produzcan altercados dentro (de los locales) por el peligro que supone para el resto de personas que se encuentran en ese momento en el establecimiento".

El presidente de la principal patronal del sector en Asturias, que antes de efectuar esas reflexiones quiso trasladar su profundo pesar a los familiares del fallecido y su rechazo y condena a los actos de violencia, también quiso apuntar que lo ocurrido fue un "hecho aislado", recordando los numerosos bares de copas y personas que salieron ese día sin que se produjeran incidentes.

A través de un comunicado, Otea desarrolló este punto señalando que "tenemos que decir que es un hecho aislado y que Gijón es una ciudad muy segura. Hechos así se producen por la existencia de personas que no se saben comportar dentro de una sociedad cívica y respetuosa como la nuestra. Asturias sigue ofreciendo cifras que la sitúan en una de las comunidades más seguras de España según los datos de la Policía Nacional", "es un hecho lamentable pero que supone una excepción en el comportamiento de la ciudadanía de Gijón".

Otea también destacó la "rápida y eficaz" intervención de la Policía Nacional y la Policía local y de los servicios sanitarios de emergencia tras la agresión, y mostró su deseo de que los agresores pasen pronto a disposición judicial.

Desde el Ayuntamiento, la alcaldesa, Carmen Moriyón, quiso ayer expresar su "consternación por unos hechos de tanta gravedad y que merecen nuestra más enérgica condena. Desde el Ayuntamiento queremos enviar un sentido pésame para los familiares y amigos de la víctima. Gijón hará todo lo posible y pondrá a disposición todos sus recursos para esclarecer lo ocurrido".

Desde el movimiento vecinal se habla de lo acaecido con extrema preocupación, tanto por parte de los representantes de los vecinos de la zona centro, uno de los polos del ocio nocturno en Gijón, como desde la federación vecinal gijonesa.

Así, la presidenta de la Asociación de Vecinos Jovellanos, de la zona centro, Maite Martín, señaló ayer que "desde que conocimos la noticia no podemos evitar recordar la agresión que sufrió Germán hace unos años. El modus operandi se repite en casi todos los casos: la discusión se inicia dentro de los locales y termina en agresión en la calle, con fatales consecuencias como en este caso", algo que lleva a la presidenta vecinal de la zona centro a plantear que "igual habría que replantearse el protocolo de seguridad de los locales de ocio nocturno y su responsabilidad en estos casos. Los vecinos de la zona llevan muchos años sufriendo las consecuencias de este tipo de ocio –como ruido, suciedad, vandalismo o agresiones– y reclamando más presencia policial durante los fines de semana en la zona que, a la vista de los últimos acontecimientos, creemos que es necesaria".

Por su parte, el presidente de la Federación de Asociaciones de Vecinos de Gijón (FAV), Manuel Cañete, considera que este crimen "es otro suceso más, demasiado reincidente, en un espacio pequeño de nuestra ciudad", trayendo también a colación el caso Germán "y otros con consecuencias funestas".

Cañete considera que "hay que hacer una valoración objetiva y serena de lo que está ocurriendo en la noche gijonesa, que no es ajena a otras ciudades, en todos sus aspectos: horarios, entornos, masificación, descanso de los vecinos, alcohol, drogas... Y tenemos que empezar a cuestionarnos si el modelo es acertado y si los mecanismos propios de accesos y vigilancia sirven realmente para algo o hay que marcar más y mejores pautas".

Ante el grave suceso que ocurrió en la madrugada del sábado en la zona de Fomento, el presidente vecinal gijonés apuntó que, "aunque no es el momento, tras este suceso tan tremendo hay que empezar a valorar y poner en cuestión las masificaciones festivas y los horarios de cierre en locales nocturnos. Esta agresión se produjo pasadas las 3 de la mañana y sabemos de otras que han sido más avanzada la noche, lo cual contradice la norma de horarios de cierre en nuestra ciudad. Una agresión, condenable sin paliativos, que nos tiene que hacer recapacitar a todos sobre el modelo de ocio diurno y nocturno que queremos".

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