Difícil de olvidar

La ministra de Transportes va camino de convertirse en una de las mayores calamidades políticas de los últimos años para Asturias, y no será por falta de competidores. Los escándalos de la Variante y los trenes de Feve, saldados con comparecencias de subalternos y destituciones en escalones inferiores, han situado a Raquel Sánchez en el foco de toda la región. Pero la exalcaldesa de Gavá, nombrada en su día por Pedro Sánchez para negociar con los partidos catalanes suculentas inversiones, ya se había dado a conocer mucho antes en Gijón. Primero, ignorando durante meses cualquier asunto que tuviera que ver con el plan de vías y, después, aprobando una ridícula inversión para el vial de Jove tras prometer todo lo contrario. Será difícil olvidar su nombre.

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