Memoria histórica y fosas comunes

Armando Nosti Caso

Armando Nosti Caso

"El Abismo del olvido", es un cómic histórico que desgrana la historia de las fosas comunes de Paterna y la de un enterrador republicano que se jugó la vida a diario, para dar un mínimo de dignidad a unos enterramientos indignos, escondiendo los datos del ejecutado en pequeñas botellas entre sus ropas, recogiendo mínimos recuerdo para entregar a los familiares de las víctimas, y colocando los cadáveres ordenadamente evitando que los asesinados fueran amontonados según iban cayendo como querían sus verdugos, que hasta en eso eran miserables. La mayoría de los asesinados lo fueron por "adhesión a la rebelión", ni siquiera tuvieron el triste consuelo de ser condenados por defender la legalidad frente a quienes la traicionaron. Muchos fueron fusilados por viejas rencillas, por venganza o para quedarse con sus tierras.

Sorprenden las cifras. En el cementerio de Paterna hay documentadas más de 150 fosas y al menos 2.237 personas asesinadas por la dictadura entre 1939 y 1956.

Fue Pepica, la hija octogenaria de uno de los asesinados, la que inició los trámites para la exhumación a raíz de la Ley de la memoria histórica. No se lo pusieron fácil en el Ayuntamiento, por lo de las viejas heridas y esas historias que ya fieden. Insistió hasta conseguir enterrar a su padre junto a su madre. Llegó por los pelos, poco después de obtener el permiso para abrir las fosas, la mayoría absoluta de Rajoy paralizó la ley al dejarla sin dotación económica.

Las fosas de Paterna son una pequeña parte de las que hay por todo el país, las cifras oficiales del Ministerio de Justicia registran 2.567 fosas comunes en España. Se contabilizan 58.000 víctimas y se calcula que puede haber más de 114.000 desaparecidos. El mapa de la Memoria asturiana registra 398 fosas de la Guerra Civil en 62 municipios.

Al Partido Popular éste tema le molesta, los réditos se los dan los muertos de ETA y señalar a sus herederos, aunque no lo sean. Ellos se saben herederos del franquismo y todo lo que tenga que ver con sus víctimas les resulta resbaladizo. Pero este tema hay que resolverlo ya, el gobierno de coalición tiene que tomar las riendas y habilitar los fondos y medios para solucionarlo. Si la derecha llega al poder volverá a la nada de Rajoy, por eso es urgente, por eso y porque llevamos más de cuarenta años de retraso. Hay que establecer y blindar un plan contando con las asociaciones de memoria, para garantizar el cierre de esta herida al margen de futuros resultados electorales. La aprobación de la ley por el Gobierno Zapatero abrió una ventana a la esperanza de muchos familiares de víctimas que han fallecido sin ver cumplirse la ley por la llegada de Rajoy a la Moncloa. Cada vez quedan menos testigos de las masacres y una posible llegada de la derecha al poder significaría un nuevo parón. El partido socialista tiene mil frentes abiertos, pero tiene que abrir uno más para dignificar a quienes dieron su vida por lo que el PSOE dice defender.

Lejos de abrir heridas, las exhumaciones las cerraron. Es la hora de cerrarlas todas y de terminar con uno de los capítulos más sangrientos de nuestra historia.

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