Los exalumnos de Minas se constituyen en asociación para intentar parar la mudanza de Oviedo a Mieres

Los antiguos alumnos de la Escuela de Ingenieros de Oviedo dieron luz verde, por una abrumadora mayoría, a constituirse como una asociación, lo que les permitirá tirar para adelante con su demanda en lo contencioso administrativo para intentar detener la mudanza del centro con destino al campus de Barredo (en Mieres), tal y como pretende el rector de la Universidad de Oviedo, Ignacio Villaverde. Así lo decidieron durante una reunión celebrada en la noche del jueves, en la que participó más de un centenar de exestudiantes de la Escuela y en la que, además, se presentaron los resultados de una encuesta realizada estas últimas semanas. El portavoz de esta nueva asociación, Juan José del Campo, aseguró que "abrimos una nueva etapa".

Una de las preguntas de aquel sondeo era si el "think tank" (o laboratorio de ideas) debía dar el salto para ser una asociación. Una amplísima mayoría, el 85%, dio su respaldo a la propuesta; mientras que el 57% aseguró que estaría dispuesto a colaborar económicamente con la nueva asociación o buscaría de forma activa vías de ingresos para que pueda sobrevivir. "Continuamos con la reflexión y lo que pretendemos es estar atentos al proceso. No discutimos la legitimidad que tiene la Universidad para tomar estas decisiones, lo que defendemos es que la postura del Rector está profundamente equivocada", señaló Del Campo. Los socios fundadores de la asociación –una nómina de la que forman parte Vicente Luque, José Sancho o Francisco Blanco– celebrarán en los próximos días un acto protocolario en el Hotel de la Reconquista para firmar el acta fundacional. Mientras tanto, los trámites para el traslado de la Escuela a Mieres continúan con paso firme. Falta, por ejemplo, que la Agencia Nacional de Evaluación de la Calidad y Acreditación emita un informe sobre la mudanza o que se pronuncie el consejo de Gobierno del Principado.

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