"San Josemaría tenía claro que en la Obra debía haber mujeres", dicen los autores de "Las mil primeras"

San Josemaría Escrivá de Balaguer fundó el Opus Dei en 1928 y dos años más tarde vio que en la Obra debía haber mujeres. La primera supernumeraria llegó en 1945, la segunda en 1948. Ahora un libro de Julio Montero-Díaz y María Luisa Galdón, recoge hasta el año 1963 la historia de las mil primeras mujeres casadas que buscaron la santidad por esa vía.

Lo explicaron ayer en un abarrotado Club Prensa Asturiana, los autores del libro, acompañados en la mesa por la médico de familia Cristina Sánchez. Ambos coincidieron en destacar la contribución de estas mujeres a la modernización de aquella España de los años 50, donde, como al igual que en la mayor parte de Europa, resultaba impensable que una mujer viajase sola o abriese una cuenta bancaria sin autorización de su padre o de su marido.

"La legislación a la que estaban sometidas las mujeres era parecida a la de los esclavos en el mundo romano; eran muy queridas y apreciadas, pero estaban en situación de inferioridad no sólo en lo económico", señaló Montero-Díaz, catedrático de Historia de la Comunicación de la Universidad Complutense de Madrid. "Las supernumerarias a las que entrevisté para el libro contaban su relación con la Obra como quien cuenta una historia de amor; les había cambiado totalmente sus vidas", indicó María Luisa Galdón, licenciada en Historia por la Universidad de Valladolid y desde hace años dedicada a estudios sobre la mujer. "San Josemaría tenía una imagen de la mujer sin trabas, y estaba convencido de que las mujeres podían, igual que los hombres, buscar esa santidad en medio de las cosas normales", recalcaron los autores.

Testimonio de Tina Virgili

Entre el público se encontraba Valentina (Tina) Virgili, hija de una de las primeras supernumerarias, que pidió la admisión en Barcelona. "Desde entonces en todas las generaciones de la familia ha habido miembros de la Obra; yo misma soy supernumeraria desde 1964", aseguró.

A la hora de valorar los retos a los que se enfrentan hoy las mujeres del Opus Dei, María Luisa Galdón recalcó que no piensa que fueran mejores tiempos los pasados. "Ellas también tuvieron que superar muchas dificultades. Ahora la mujer tiene mucha mas libertad. Son retos diferentes, no peores", remarcó.

Julio Montero-Díaz "quito hierro" a las dificultades que puede haber hoy en día para vivir de forma cristiana: "En 1960 las mujeres del Opus Dei llegaron a Japón donde había un uno por ciento de católicos, aquí estamos un poco mejor", señaló. "Lo que quería San Josemaría es más parecido a lo que es hoy la Obra a lo que fue en algún momento de su vida", añadió. "Hemos qurido contar la historia documentada de un millar de mujeres que, en una España que literalmente no sabía qué hacer con ellas, se supieron llamadas a empezar algo grande, que además era de Dios", concluyeron los autores.