Jaime Menéndez Corrales se va por la puerta grande tras 32 años como alcalde de Soto del Barco

Emocionado, agradecido y orgulloso de su pueblo. Así se presentó Jaime Menéndez Corrales en la comida que los vecinos de Soto del Barco le hicieron a modo de despedida tras 32 años de alcalde del concejo. "Tengo sentimientos encontrados. Por un lado, la emoción de ver a toda esta gente; y por otro, que se acaba mi trayectoria, algo que es deseado. La gente siempre respondió muy bien en las elecciones, el acto de hoy es una muestra más de cariño", afirmó Corrales, tras ser recibido entre aplausos en un salón lleno, con 249 comensales. El Alcalde se sintió como "profeta en su tierra": "Si no, no hubiera sido posible todos estos años intensos de apoyos, con sus luces y sus sombras".

A la cita acudieron vecinos, la mayoría, y amigos, muchos, de su larga trayectoria política. Algunos, políticos como Álvaro Queipo, secretario general del PP asturiano, Belarmino Fernández (PSOE), alcalde de Somiedo con 28 años de gobiernos consecutivos, Carmen Arango (PSOE), su homóloga de Muros... y el sucesor de Corrales, Jimi Pérez. Todos destacaron no solo la gran capacidad política del homenajeado, su bonhomía y su cercanía. "Es una persona íntegra con valores políticos, morales y personales", señaló Juan Lázaro, gerente de desarrollo rural y amigo del aún Alcalde en funciones.

Hubo abrazos, muchos, y muestras de cariño en forma de palabra, como las expresadas por Leni Menéndez y Carmen Fernández, de las amas de casa, que hablaron de Jaime Menéndez como el "patrón (del concejo) durante muchos años, por eso hay que estar agradecidos y festejarlo". También lo celebraron Ismael Álvarez y Alicia Mendoza, que definieron al "Alcalde de siempre" como un "paisano, un político que escucha".

Y tras los postres, hubo palabras de Lázaro, Queipo, el Alcalde de Somiedo, Jimi Pérez Lorente, que expresó que Jaime Menéndez Corrales "deja el listón muy alto, con una nota media altísima", y cerró el homenajeado que, emocionado, dio las gracias por todo, por la amistad y el respaldo que le dieron las urnas durante más de tres décadas.

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