Unos seis artistas abrirán la nueva residencia de Contrueces este diciembre

El primer gran proyecto de la nueva hoja de ruta cultural echará andar el mes que viene, antes de Navidad, con la puesta de largo de la nueva residencia de artistas en el albergue de San Andrés de Cornellana de Contrueces. Un complejo para el que se habían pensado distintos usos y que ahora se quiere enmarcar en un eje cultural norte-sur con Tabacalera como cabecera. El centro tendrá que esperar aún unos meses para terminar sus últimos retoques –unas mejoras que no se podrán efectuar hasta tener activos los presupuestos–, pero el compromiso de los foristas de que comenzase a funcionar ya este año sí podrá cumplirse mediante la puesta en marcha de un proyecto piloto. «Podemos empezar a trabajar con un equipamiento básicos y unos cinco o seis artistas que daremos a conocer en diciembre. Para este proyecto piloto, hemos recurrido a creadores con los que ya teníamos relación a través de la Fundación Municipal de Cultura», señala la edil Montserrat López Moro, cuyo equipo ha calculado que el centro podrá acoger, a pleno rendimiento, a unos quince artistas cada año.

La residencia artística en Contrueces, aclara la concejala, tiene como objetivo principal «dinamizar» el propio barrio y, de paso, dar un espacio permanente a la creación artística. El plan piloto que arranca ahora servirá como laboratorio de pruebas para un proyecto que, en realidad, aspira a tener un alcance más allá de lo local. «Nuestra visión es tener un impacto nacional e internacional», reconoce la edil, que explica que, como en épocas navideñas las residencias artísticas suelen estar cerradas, el verdadero proceso de creación de los seleccionados comenzará a partir de enero. «Tras esos procesos que surjan, trataremos de relacionarlos con otros equipamientos de la ciudad, ya sea haciendo exposiciones, en casi de que sean artistas visuales, o espectáculos de danza. Queremos dar voz a todo tipo de disciplinas», adelanta la forista.

Abrir una residencia en el albergue, sumado a la futura reforma de los depósitos de Roces, sirve también para suplir el cambio de modelo de Tabacalera respecto al anterior gobierno, que proyectaba en la vieja fábrica varios espacios de creación artística. La visión de los foristas, que apuesta por liberar las dos plantas en altura del edificio para acoger grandes exposiciones temporales, trata de compensar la pérdida de esos espacios con estos otros dos proyectos que, a su juicio, ayudan también a «descentralizar» la cultura en el concejo. López Moro aclara también que hay una «relación fluida» con Laboral Centro de Arte, con quien se tratará de crear nuevas sinergias. «Nuestro modelo será diferente al suyo, así que puede que tengan necesidades que nosotros podamos suplir, y al revés. Nos beneficiará mutuamente. También hemos tomado como modelo residencias de Bilbao y Barcelona y estamos en coordinación con la Fundación Mapfre, una entidad referente», asegura. La primera convocatoria se prevé lanzar en marzo.