El Principado acusa al Arzobispo de "machismo cargado de incienso" y "utilizar Covadonga como una caverna reaccionaria"

Gimena Llamedo, vicepresidenta de Asturias: "Su homilía reaccionaria se encuentra muy lejos de los postulados del Papa Francisco"

Ovidio Zapico, consejero de Ordenación del Territorio: "Sus declaraciones son desafortunadas, provocadoras y retrógradas; un discurso en blanco y negro"

Gimena Llamedo y Ovidio Zapico, durane su visita a la fiesta el Día de Asturias en Laviana.

Gimena Llamedo y Ovidio Zapico, durane su visita a la fiesta el Día de Asturias en Laviana. / D. M.

El Principado de Asturias ha querido replicar al Arzobispo de Oviedo por las palabras que pronunció en su homilía de la misa en la basílica de Covadonga por el Día de Asturias. Jesús Sanz Montes se mostró crítico con la Agenda 2030 y el ecologismo "subvencionado", cargó contra el feminismo "de postureo y tanto empoderamiento" y calificó la polémica del beso de Rubiales a Jenni Hermoso de "leyenda del beso" que responde a un "sainete jaleado" para "eclipsar vergüenzas", entre las que dejó caer las negociaciones con partidos independentistas para formar gobierno en España. La socialista Gimena Llamedo, vicepresidenta del Principado, y Ovidio Zapico (IU), consejero de Ordenación del Territorio y Derechos Sociales, fueron quienes respondieron con contundencia a Sanz Montes. Lo hicieron desde Laviana, donde se celebran los festejos por el Día de Asturias, y lejos de Covadonga, donde tuvo lugar la ceremonia religiosa, a la que sí asistió el presidente de su gobierno, Adrián Barbón.

"El arzobispo ha utilizado su homilía con un discurso reaccionario, más propio de Vox. Ha utilizado Covadonga como una caverna reaccionaria. Con las palabras que dijo hoy vuelve a demostrar que está totalmente alejado de lo que piensa la sociedad asturiana, aunque él crea que esto le acerca. En definitiva, los asturianos están muy lejos de todos los postulados que ha dicho. Y también su homilía reaccionaria se encuentra muy lejos de los postulados del Papa Francisco. No hay más que entrar en detalle de algunas de las cuestiones que dijo, como en la que se posicionó en contra de la Agenda 2030, respecto a la que hay un claro consenso mundial y que es algo que vemos en el día a día", criticó Gimena Llamedo, que se extendió en su respuesta al prelado asturiano.

"Pero no se quedó ahí, y quiso atacar al derecho al aborto y a la eutanasia, que es una decisión que las personas pueden tomar y de la que él puede discrepar, pero no puede utilizar ese púlpito para decir mentiras y tergiversar y tratar de manipular, como vemos que está haciendo", agregó la vicepresidenta socialista del Principado.

Llamedo siguió desgranando los puntos más controvertidos de la homilía del Arzobispo de Oviedo. "Pero eso no quedó ahí, y decidió hacer crítica al feminismo, a ese avance de la igualdad. Las mujeres somos protagonistas del presente, y seguiremos siendo protagonistas del futuro, junto con los hombres, en ese plano de igualdad. Y lo que dijo hoy, en definitiva, es machismo. Trató de vestirlo de humorada, pero es un machismo cargado de incienso, y se aleja mucho de lo que tenemos que hacer las personas que tenemos unas responsabilidades en las que hubo muchos años de machismo en esta sociedad y en las que tenemos que tener un claro compromiso de avance", valoró respecto al comentario vertido por Sanz Montes sobre el caso Rubiales. "Le recuerdo que son numerosas las víctimas de violencia de género que son asesinadas, y muchas las que están sometidas a esa agresión. Con lo que referirse a un hecho de acoso (por el beso de Rubiales a Jenni Hermoso) con ese humor le aleja mucho de lo que debería hacer una persona comprometida", subrayó Llamedo.

Asimismo, la vicepresidenta del Principado quiso contraponer la homilía de Covadonga con el espíritu de la fiesta regional. "Hoy es un día de unidad, de concordia, de diálogo, de poner todo lo bueno que tiene Asturias y los asturianos y asturianas, y el Arzobispo ha demostrado que apuesta por la concordia con palabras huecas, porque lo que está haciendo es precisamente generar controversia y alejar posturas. Una persona como él debería remar en la dirección del diálogo, del acuerdo, del consenso, de no generar esa crispación que hace cada 8 de septiembre, cuando utiliza Covadonga como una caverna reaccionaria para trasladar esa homilía tan alejada de la realidad y de lo que ocurre en Asturias. Es un despropósito", afirmó.

Ovidio Zapico, político de IU que encabeza la consejería de Ordenación del Territorio y Derechos Sociales, fue más corto en su respuesta, pero no menos contundente. La expresó, al igual que Llamedo, en su visita al mercado de la fiesta desplegada en Pola de Laviana por el Día de Asturias. "Estas celebraciones no las van a enturbiar las declaraciones del Arzobispo en Covadonga. Son, en primer lugar, desafortunadas. En segundo lugar, provocadoras. En tercer lugar, son retrógradas. Pero afortunadamente no van a encontrar eco en una sociedad asturiana que hoy está disfrutando aquí, en Pola de Laviana, de un día de asturianía, de fiesta y de confraternización, en el que valores que él pretende que perdamos de nuevo están muy arraigados en esta sociedad. Valores del respeto a la mujer, del papel que debe representar la mujer en la sociedad... Por muchas homilías radicales que lance, no van a poder volver ya atrás en esta sociedad que se abre paso en un marco de tolerancia, respeto e igualdad, de futuro que es compartido, progresista y va a traer a Asturias tiempos de reforma y progreso alejados de discursos de blanco y negro que no nos representan", respondió Zapico.