Las inmobiliarias de Siero apenas tienen vivienda de alquiler pese a la alta demanda

La radiografía de la vivienda en Siero que realizan los profesionales del sector inmobiliario local desvela que la demanda es muy superior a la oferta y que encontrar un piso o una casa en régimen de alquiler con una renta asequible resulta muy difícil, por no decir imposible, en Lugones, la Pola y otras zonas residenciales del concejo, incluida La Fresneda. Esta escasez de vivienda en el mercado afecta muy especialmente a la capital municipal en el caso del alquiler. "Hay muy poca, y la que hay tiene unos precios elevados, de 450 o 500 euros de renta mensual por un piso de dos dormitorios", apunta María Ángeles Rivas, de Inmobiliaria La Isla.

La situación es bastante similar en Lugones, donde en estos momentos, y contra lo que sucede en la Pola, hay varias promociones de viviendas en construcción. "La demanda de alquiler aquí es muy alta, pero la verdad es que hay poca en el mercado", señalan desde la inmobiliaria local InmHome. Este problema afecta especialmente a los jóvenes en un territorio que ha experimentado un gran tirón demográfico en los últimos lustros. Para tratar de revertir la situación, el Ayuntamiento ha cedido al Principado una finca en la zona de Les Bellotines (Lugones) para la construcción de 44 pisos de alquiler social destinados preferentemente a menores de 35 años y cuya renta se ha fijado en un máximo de 8,50 euros el metro cuadrado para que resulte asequible.

La alta demanda de viviendas de alquiler sin que apenas haya oferta para atenderla se repite en los núcleos rurales, sobre todo en aquellos ubicados en la zona norte del concejo y más cerca de Oviedo o Gijón. "Hay mucha gente que busca una casa de pueblo para vivir en alquiler y que no encuentra, ya que lo que hay en esas zonas son promociones en venta a unos precios que no están al alcance de todo el mundo", subraya el responsable de otra agencia asturiana que trabaja el mercado del centro de la región. La zona rural de Siero también figura como objetivo para personas residentes en el centro y el sur de España y que quieren trasladarse a vivir a Asturias o tener en la región su segunda residencia. "Ese interés de gente de fuera se nota mucho, cada vez más", señalan desde la inmobiliaria InmHome de Lugones.

Por lo que se refiere a vivienda nueva, María Ángeles Rivas reconoce que la Pola está "bastante parada". Con alguna promoción en el entorno del recinto ganadero del este de la localidad o en las inmediaciones del Ayuntamiento, el sector espera que se pongan en marcha nuevos proyectos que dinamicen el mercado local. Y es que, según las inmobiliarias, la escasez de la oferta tira de los precios hacia arriba. Un apartamento en la capital sierense sale ahora por unos 80.000 euros, mientras que los pisos de tres dormitorios llegan a los 120.000 euros.

Los precios de la vivienda en Lugones, quizás por su gran cercanía a Oviedo y por sus excelentes comunicaciones, superan a los que rigen en la Pola. Los pisos nuevos de tres habitaciones pueden irse por encima de los 200.000 euros, mientras que los usados andan por los 150.000 euros, afirman fuentes del sector. El indudable tirón residencial de Lugones, convertida en la localidad más poblada de Siero, queda patente al observar las grandes grúas para los edificios de viviendas que ahora mismo están en construcción en Les Bellotines, a la entrada de la localidad según se llega de Oviedo o en las inmediaciones del instituto de Secundaria. Además, también hay una promoción de viviendas unifamiliares en El Carbayu.

La Fresneda

Muy cerca de Lugones, La Fresneda retomó el pulso de la construcción con la pandemia y, desde entonces, mantiene esa tendencia al alza. El Ayuntamiento ha dado recientemente licencias para levantar una nueva promoción de vivienda unifamiliar, concretamente para un núcleo de nueve casas adosadas en el conocido camino de La Requexada y hay más proyectos.

De acuerdo con los datos que maneja el sector, el precio de la vivienda en Siero se sitúa en estos momentos en una media de 1.162 euros el metro cuadrado, con un crecimiento interanual de dos puntos, pero bastante por debajo de los 1.375 euros de la media regional. La zona más cara del concejo, y con diferencia, es la urbanización de La Fresneda, donde el metro cuadrado se dispara a los 1.737 euros. En la Pola sale a 1.302 euros, tras incrementarse en casi un 8% durante el último año, mientras que en Lugones se sitúa en 1.365 euros. Con todo, lo que más llama la atención es que, según el último informe del portal inmobiliario Idealista, en parroquias como Muñó o San Martín de Anes, de la zona norte del concejo, el precio de la vivienda se ha incrementado un veinte por ciento en un año, hasta alcanzar niveles similares a los que se registran en Lugones. Se trata de unos territorios en clara expansión demográfica en los que también se han registrado importantes incrementos de población durante los últimos años por ese gran atractivo residencial.