Ruta circular El Camín Encantáu, un fascinante viaje a través de la mitología asturiana

Este recorrido es un paseo que te transporta a épocas pasadas, donde la imaginación y la preservación del entorno natural van de la mano

El Camín encanau

El Camín encanau / LNE

El Camín Encantáu, ubicado en el concejo de Llanes, es una experiencia única, según Turismo de Asturias. En realidad, se convierte en un fascinante viaje a través de la mitología asturiana, donde numerosos relatos y leyendas fantásticas han perdurado a lo largo del tiempo.

Este recorrido es un paseo que te transporta a épocas pasadas, donde la imaginación y la preservación del entorno natural van de la mano. Aquí, podrás descubrir que las criaturas míticas como los cuélebres, las xanas o los trasgos de alguna manera parecen cobrar vida...

Recorrido

El comienzo del sendero se encuentra en la localidad de Venta los Probes, en Llanes, justo al lado del bar y la bolera, donde se pueden admirar las dos primeras de las numerosas esculturas de madera que decoran el camino.

Desde allí, tomamos la carretera hacia Callejos y, antes de cruzar el río, giramos a la izquierda para caminar junto al río San Miguel. Al llegar a un cruce, giramos nuevamente a la izquierda y, tras cruzar la carretera, seguimos una pista que nos lleva a Gomezán, donde nos da la bienvenida el Sumiciu, un duende relacionado con la desaparición de objetos.

Después de pasar el pueblo, la pista se convierte en un sendero que se adentra en un hermoso bosque que nos conduce a la localidad de La Malatería, donde nos encontramos con "El hombre del saco", un personaje del folclore infantil.

Tras visitar la iglesia y el pueblo, volvemos a la carretera y giramos a la derecha durante un corto tramo antes de tomar la segunda pista a la izquierda, que nos lleva a una zona de pastizales. Poco después, el camino se convierte en un sendero que nos introduce en un hermoso bosque donde nos recibe el "Pataricu", un ser de un solo ojo que vigila a los niños para alimentarse de ellos.

Camín Encantáu

Camín Encantáu / Rutas Prestosas

El camino se ensancha nuevamente y nos presenta al "Diablo burlón", un ser mitológico capaz de transformarse en diferentes criaturas, como un carnero.

Continuamos por la pista que desciende hacia el pueblo de Villanueva, donde nos encontramos con el "Nuberu", el señor de la lluvia y las tormentas, en las inmediaciones del Campu La Prida, donde se encuentra la iglesia de Santa Eulalia de Ardisana.

Atravesamos la explanada, dejando atrás la iglesia, y nos dirigimos hacia un gran nogal, donde encontramos un camino empedrado que desciende suavemente y nos lleva junto a una carretera. Aquí seguimos a la izquierda para entrar en el pueblo. Continuamos y, a pocos metros, giramos a la derecha y descendemos por un camino que nos lleva a la Fuente del Cañu, donde se encuentra la figura del "Segador", quien blandiendo su guadaña, personifica tanto el bien como el mal.

Después de pasar la fuente, un camino a la izquierda nos lleva a Ardisana, donde nos recibe "El Cuélebre", una serpiente alada que custodia tesoros y princesas, junto a una gran roca.

Dejamos atrás la roca y llegamos a una carretera, donde giramos a la derecha y pasamos junto a las escuelas. Un poco más adelante, un camino empedrado desciende en un bosque. A pocos metros, encontramos un camino a la derecha que continúa descendiendo junto a un arroyo, donde nos topamos con la escultura de la "Lavandera", un personaje que es tanto bueno como malvado.

Siguiendo el descenso, llegamos a la Cruz de los Garabiales, que data del año 1761. Un poco más abajo, nos encontramos con el "Busgosu", una criatura mitad hombre, mitad carnero, benefactor y guía de pastores, que ayuda a mantener las cabañas de las brañas y protege la flora y la fauna de los bosques.

Finalmente, llegamos a la carretera en la entrada de Riocaliente, donde nos topamos con la penúltima escultura, "La Manona o Pesadiellu", una mano gigantesca y aterradora que perturba todo a su paso en una casa. Cruzamos el puente sobre el río San Miguel y entramos en Riocaliente.

En este lugar, entre un conjunto de hórreos y al lado de un inmenso castaño, encontramos a la "Castañera". Luego, retrocedemos para regresar a la carretera asfaltada, donde giramos a la izquierda y caminamos junto al río San Miguel, disfrutando de un hermoso paisaje con el pico Culobardón de la Sierra de Peña Villa al fondo, hasta regresar al punto de partida después de 2 kilómetros.

Distancia

9,37 km

Desnivel positivo

238 m

Dificultad técnica

Fácil

Desnivel negativo

238 m

Altitud máxima

228 m

Altitud mínima

21 m

Tipo de ruta

Circular