En territorio comanche

La opinión sobre el Oviedo y el Sporting: El "fúrgol" burbuja y el real

La salvación del Oviedo y del Sporting abre la puerta al derbi, mientras que la casa azul tiene un gran gesto con la Asturias vaciada

Pablo González

Pablo González

Los sindicatos en las calles pidiendo lo de todos los años por estas fechas y el Sporting dando un paso de gigante hacia la salvación horas después de que el Oviedo respirara todavía más tranquilo tras su remontada del domingo frente a la Ponferradina, carne de Primera Federación. Son las cosas del querer, de este fútbol que se trocea buscando los pinchazos televisivos hasta el infinito y más allá. El triunfo rojiblanco ante los primos hermanos de Lugo sirve ya para que los dos grandes de la madreñina "furgolística" se centren en el último derbi del curso, el primero en El Molinón con Pachuca y Orlegi a los mandos.

No habrá nada en juego salvo la honra, así que sería bueno asistir a un espectáculo que tape la irregular temporada que han venido realizando ambos equipos. Cuando lo único que puede maquillar una temporada es el torneo de barrios y quién monta a quién en la clasificación final, significa que el curso no pasará a la historia.

Mientras tanto, guiño del Oviedo a la Asturias vaciada. Gran gesto el del presidente del Oviedo, "Martincito" Peláez, que apareció por sorpresa por Mouroso para visitar a Alfredo Pérez y Elena Parrondo, el matrimonio que perdió por los incendios que arrasaron Asturias un pinar que era básico en la economía familiar. Actos así deberían servir para reconciliar al pueblo con este fútbol-burbuja en el que los protagonistas son cada vez más seres intocables y gaseosos que parecen caminar a cinco metros del suelo. Ojalá sirviera de precedente, ¿oyisti, güey?

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